martes, 24 de marzo de 2015

78.

En 1624 Galileo visitará Roma de nuevo, donde mantendrá varias entrevistas con el Papa Urbano VIII, quien le garantiza que podrá escribir sobre el Copernicanismo, siempre que lo considere estrictamente como una hipótesis matemática.
 En 1632, tras conseguir de forma poco ortodoxa los permisos eclesiásticos oportunos, Galileo publica sus "Diálogos", en los que se ataca abiertamente el aristotelismo y se hace una defensa cerrada de las teorías copernicanas. Uno de los personajes, Simplicio, a quien se presenta como alguien torpe intelectualmente, defiende en la obra algunos argumentos que eran utilizados por el Papa Urbano VIII, por lo que esas coincidencias, según algunos, fueron utilizadas por los próximos a Urbano VIII para enemistarle con Galileo. Ya fuera por esta razón, lo cierto es que Urbano VIII prohíbe la difusión de los "Diálogos", ordenando que una comisión especial estudie el libro. Siguiendo el dictamen elaborado por dicha comisión, Urbano VIII remite el caso a la Inquisición, que convoca a Galileo a presentarse ante el tribunal en Roma

No hay comentarios:

Publicar un comentario